Por su solidez y fiabilidad, muchas personas consideran que invertir en proyectos inmobiliarios, tanto residenciales como comerciales, son una de las opciones de inversión más viables.
Sin embargo, durante acontecimientos sin precedentes, como una recesión, muchos suelen preguntarse si un bien inmueble puede hacer frente a la tormenta. Y lo cierto es que, aunque estas situaciones no son necesariamente ideales, pueden crear oportunidades para los inversionistas inmobiliarios.
Si estás pensando en entrar en el mercado de bienes raíces o ya posees propiedades para invertir, es importante tener una estrategia para maximizar los beneficios durante situaciones como esta. Para ayudarte con esto, en el siguiente artículo te mostramos por qué deberías realizar inversiones inmobiliarias en una recesión.
Tabla de Contenido
¿El sector inmobiliario es una buena inversión en tiempos de recesión?
Una recesión se caracteriza por la disminución de la economía. Las personas gastan menos dinero en compras opcionales y se centran en lo esencial. Las empresas pueden ralentizar la contratación o empezar a despedir trabajadores para mejorar sus resultados. Los precios de las acciones pueden caer ante la incertidumbre de la economía.
Aunque el panorama no es precisamente optimista, el mercado de bienes inmuebles puede ofrecer cierta estabilidad a los inversionistas cuando la economía se ralentiza. Hay tres factores principales que pueden hacer del sector inmobiliario un buen lugar para invertir si buscas una alternativa en una recesión:
1. Baja correlación con las acciones
Históricamente, el sector inmobiliario tiene una baja correlación con el mercado de valores. Esto significa que incluso si las acciones están experimentando un aumento de la volatilidad debido a una recesión, hay muy poca repercusión en el mercado inmobiliario.
2. Necesidad de una vivienda
Incluso cuando la economía está en recesión, hay personas que siguen necesitando un lugar donde vivir. Si la demanda de propiedades en alquiler se mantiene o incluso aumenta durante una recesión y la oferta de viviendas es limitada, los inversionistas inmobiliarios están mejor posicionados para poder contar con un flujo constante de ingresos por alquiler.
3. Oportunidades y descuentos
Una recesión no conlleva automáticamente una caída del valor de las viviendas. Pero si esta situación hace que disminuya la demanda en el mercado inmobiliario, los compradores podrían tener la oportunidad de adquirir propiedades a un precio más bajo.
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Opciones de inversión inmobiliaria en tiempos de recesión
Si estás interesado en empezar en la inversión inmobiliaria durante una recesión, lo primero que debes tener en cuenta es qué tipo de propiedades pueden ser las más adecuadas para ti.
Comprar un inmueble destinado al alquiler puede ser una opción obvia. Siempre que tengas inquilinos, el arrendamiento de una propiedad puede generar ingresos durante una recesión.
Hay diferentes tipos de propiedades de alquiler que podrías considerar, algunas de ellas son:
- Inmuebles unifamiliares
- Casas pequeñas
- Dúplex
- Edificios de departamentos
- Condominios
- Oficinas
Cuantas más unidades puedas poner en alquiler, más ingresos podrás generar. Pero un mayor número de inmuebles puede implicar mayores gastos de mantenimiento y más responsabilidades en general.
Si lo deseas, puedes contratar a un administrador de propiedades para que supervise tus alquileres, pero tendrás que pagarle unos honorarios que pueden restarte beneficios.
Además, no solo los inmuebles residenciales pueden ser una buena inversión en bienes raíces durante una recesión. Ciertos tipos de propiedades comerciales, como oficinas, almacenes y terrenos agrícolas, pueden seguir funcionando bien durante una situación como esta.
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Consejos para invertir en inmuebles en tiempos de recesión
Si estás interesado en explorar las inversiones inmobiliarias durante una recesión, aquí te mostramos tres consejos útiles que debes considerar.
1. Ten en cuenta la ubicación
La ubicación es siempre un factor importante a la hora de elegir inversiones inmobiliarias. Si buscas propiedades para arrendar, infórmate sobre la zona y comprueba la situación general del mercado.
Lo ideal es que busques invertir en propiedades en áreas donde la demanda sea alta y los precios de alquiler te permitan mantener el margen de beneficios que buscas.
2. Evalúa el flujo de caja
El flujo de caja se refiere a la cantidad de dinero que te quedas tras deducir los gastos de los ingresos por alquiler. En una recesión, puede ser necesario mantener una cantidad mayor de efectivo como reserva para cubrir los gastos que vayan surgiendo, sobre todo si la inflación sigue siendo alta.
3. Compara las opciones de financiación
Si necesitas financiar una inversión inmobiliaria durante una recesión, presta mucha atención a los tipos de interés y las opciones de préstamo. Los intereses pueden empezar a subir al principio de una situación como esta y luego bajar. El momento en que pidas el préstamo puede suponer una gran diferencia en el precio total del mismo.
Ahora ya conoces los aspectos positivos de invertir en bienes raíces en una recesión. Como ves, la inversión inmobiliaria incluso en estas circunstancias puede ser una buena forma de diversificar tu cartera. ¡Esperamos que esta información te haya sido de mucha utilidad!
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